lunes, 1 de febrero de 2010

31 de enero - El Dios de la juventud y de la alegría


Dos son los principales engaños con los cuales el demonio quiere alejar a los jóvenes de la virtud.
El primero es ponerles en la mente que el servir al Señor consista en una vida melancólica y alejada de toda diversión y placer. No es así, queridos jóvenes. Yo quiero enseñarles un método de vida cristiano, que sea al mismo tiempo alegre y contento, mostrándoles cuáles son las verdaderas diversiones y los verdaderos placeres, para que puedan ustedes decir con el santo profeta David: sirvamos al Señor en santa alegría, servite Domino in laetitia. (…)
El otro engaño es la esperanza de una larga vida con la comodidad de convertirse en la vejez o al borde de la muerte. (…) ¡Quién nos asegura poder llegar a viejos? Habría que tener un pacto con la muerte para que nos espere hasta ese tiempo, pero la vida y la muerte están en las manos del Señor. Que si Dios les concediese una larga vida, escuchen lo que les dice: el camino que un hijo tiene en la juventud, se continúa en la vejez hasta la muerte. (…) Si nosotros comenzamos ahora una vida buena, buenos seremos en los avanzados años, buena nuestra muerte y principio de una eterna felicidad.

San Juan Bosco
Opere Edite/2
LAS, Roma 1976, pp. 185-188

No hay comentarios:

Publicar un comentario